Tu corazón en Cristo o en la materia

«Todo lo considero basura, comparado con el sublime conocimiento de Cristo…»  Este podría ser el lema para nuestro año nuevo: renunciar a cosas para tener al Todo, vender todo para comprar el tesoro, la perla de valor infinito, a Jesucristo, quien desea unirse a nosotros con un amor inefable. Lo encontraremos al lado de la Virgen, la «toda, sola y siempre de Dios».